¿Qué es la función paterna?

La función paterna desde el vocabulario psicoanalítico tiene un significado diferente al significado más común. Desde el Centro de Psicologia Canvis en Barcelona, os hablaremos de ambas perspectivas de una manera unificada.

Para el psicoanálisis, la función paterna facilita la separación entre lo biológico y lo pulsional, es decir, de los instintos. De esta manera, se favorece el acceso a lo simbólico. Es una función afectiva socio-cultural, de carácter real y simbólico que trasciende las funciones que puede ejercer individualmente un padre (Arvelo, 2001). Ordena la estructura psíquica con carácter simbólico.

Así pues, la función paterna no necesariamente tiene que ser cumplida por el padre real, porque lo realmente importante es que se cumpla con el objetivo de la función paterna, que no es otro que transmitir al hijo que no podrá serlo todo para la madre, no tendrá exclusividad para el hijo. Por lo tanto, vemos el simbolismo de esta función, que quiere distanciar a la madre y el hijo.  Éste es el nudo de muchos sujetos neuróticos al no resignarse a esta renuncia (Rosso, 1998).

La función paterna constituye un epicentro crucial en la estructuración psíquica del sujeto (Dor, 1989 citado en Sánchez, 2015). El hecho de que el hombre no sea una mujer, lo imposibilita de poderse quedar embarazado, y eso es un limitante biológico que hace que el hombre pueda coger el importante rol de interlocutor del eje diádico madre-hijo. Es decir, puede ejercer la función de impedir la fusión madre-hijo y evitar la relación incestuosa por la otra (Arvelo, 2001).

La función del padre estará basada en separar a la madre del hijo: por un lado, el niño dejará de ver a la madre como un objeto de deseo y, por otro lado, la madre dejará de ver al hijo como “falo”, que no lo sea todo para la madre. El padre será el que saca al niño de la relación diádica con su madre y lo ubica en un nuevo paradigma triangular.

La importancia de la función paterna durante el desarrollo del hijo/a

Des de Canvis, siempre exploraremos la historia del paciente y todas sus etapas de desarrollo serán importantes para poder construir el contexto. Por este motivo, para Canvis es importante explicaros la importancia que tiene la función paterna durante el desarrollo del niño o niña. Aberastury (1974) observó que la función paterna tiene una relevancia muy importante a lo largo de la vida del sujeto, pero más en estos momentos:

  • Desde el nacimiento: la madre y el padre deben presentar un modelo de identificación para la niña o niño. Deben ir de la mano en las decisiones y deben participar ambos en los cuidados del pequeño desde un principio. Es importante que no se produzcan diferenciaciones significativas entre ambas implicaciones.
  • Durante el primer año de vida: para que el padre pueda elaborar su posición femenina, debe realizar tareas que están relacionadas socialmente con las mujeres (no debería ser así) como puede ser cambiar los pañales, cuidarlo afectivamente, darle de comer, etc. La voluntad del padre será imprescindible para poder conseguir dicho objetivo.
  • Durante el segundo año de vida: el rol del padre debe ir destinado a que el niño y la madre se puedan separar y no dependan tanto el uno del otro. Una manera de conseguir está separación será a través del juego. El padre debe proponer juegos y resolver la relación diádica con la madre (Fernández, 2008). De esta manera, el niño podrá construir un vínculo a través del juego y separarse en un entorno de confianza de la madre. Es importante que pueda explorar desde una zona de confort la separación de la madre, y el juego puede dar esta situación.
  • Etapa escolar: el padre debe tomar un rol importante, tiene que estar implicado en el proceso educativo de su hijo, mostrando interés y ayudándole siempre que sea necesario. Que el niño o niña perciba este apoyo, será clave para una buena función paterna.
  • Adolescencia: en esta etapa es importante que el padre aprenda a tolerar la frustración. La frustración que genera ver que el hijo va ganando autonomía y ya no lo necesita tanto. Durante estos años, la función paterna tendrá que ser capaz de tolerar los cuestionamientos que lleguen por parte del hijo y entenderlos. Será importante entender que el crecimiento del hijo conlleva la caída del padre, habrá que saber tolerarlo, aceptarlo e incluso potenciarlo. Si no se respeta este proceso, el niño puede crecer con una dependencia que no le permita potenciar su autonomía, hecho que puede hacer crecer una baja autoestima cuando tenga que afrontar problemas y no los pueda resolver sin la ayuda de su padre.

La presencialidad del padre

Así pues, vemos como el padre tiene un papel muy relevante a lo largo del proceso evolutivo del niño o la niña, su presencia es muy importante y el rol que tiene que ejecutar, aún más. Si el padre no está presente, o lo está de una manera disfuncional, puede ser muy determinante para el desarrollo psíquico del hijo.

En los primeros años de vida, la madre y el padre tienen mucha responsabilidad, son las dos personas que más tiempo deben pasar con el recién nacido, y tiene que ser un tiempo de calidad. Diversas investigaciones han demostrado que el padre puede desarrollar una función de figura de apego des del nacimiento, es apto para dar efecto y cubrir las necesidades de un bebé de manera correcta (Arvelo, 2001).

¿Por qué se producen diferencias a la hora de criar al hijo? Muchas veces por construcciones sociales, que explican que las madres son las cuidadoras primarias y los padres los cuidadores secundarios, hecho que hay que evitar. Como se ha comentado anteriormente, un aspecto que puede potenciar el vínculo padre-hijo es el juego. El juego del padre, cumple un papel muy importante en el desarrollo integral del niño.

La relación entre la voz interior y nuestro padre

Si eres adulto, sabrás que tenemos una voz interior con la que a veces tenemos conversaciones, que nos lleva la contraria, que nos hace hacer ciertas cosas cuando haríamos las contrarias, etc. Es decir, tenemos una voz interior que nos acompaña y con la que podemos interactuar.

¿Sabes de dónde sale esta voz? ¿Te lo habías preguntado alguna vez?

Está voz también tiene su propia personalidad y ha sido una personalidad construida. Concretamente, el 50% de tu voz interior se construye durante los primeros 6 años de vida. Los materiales con los que se construye son: la manera en cómo nos hablaban nuestros padres, como se comportaban entre ellos y como hablaban de nosotros. Información que afirma lo importante que son las figuras cuidadoras en los primeros años de vida, y cabe destacar que no sólo nos puede condicionar nuestra manera de ser y hacer la relación que establecen con nosotros, sino también la relación que establecen entre ellos.

Luego, el otro 25% de nuestra voz interior se forma de los 6 a los 12 años y se fundamenta en cómo nos habla y nos trata nuestro entorno. Por esto, los padres tienen que estar atentos en la etapa escolar y mostrarse como una pata fundamental de ayuda hacia sus hijos. Si estos tienen problemas en la escuela, se debe escuchar al hijo y contenerlo y recogerlo emocionalmente. Se tiene que sentir acompañado, aunque a veces su comportamiento dificulte esta conducta. El 25% restante se forma a lo largo de la vida, y también lo construye la manera en cómo nos hablan y nos tratan los demás.

Aceptación, autoestima y función paterna

Desde Canvis, consideramos que potenciar la aceptación de uno mismo y la autoestima es vital para el éxito terapéutico. Nuestra voz interior puede determinar la manera en cómo nos tratamos a nosotros mismos, es decir, nuestra autoestima. Por otro lado, también determina nuestra seguridad en la toma de decisiones.

Estos dos factores influirán directamente en la validación o el rechazo de nuestro comportamiento. Si hay una autoestima fuerte con una seguridad en la toma de decisiones, entonces validarás/aceptarás tu propia conducta, aunque después no te haya dado resultados. En cambio, si no hay autoestima ni seguridad en la toma de decisiones, entonces confrontarás tus conductas, no las aceptaras y las rechazarás. Como hemos visto, gran parte de la responsabilidad de la construcción de la autoestima del sujeto tiene el origen en la relación con sus figuras cuidadoras, de la función materna y paterna.

 ¿Quieres estar toda la vida rechazando tus propias conductas? Des de Canvis te ayudaremos a que esto no sea así. Lo podremos trabajar de muchas maneras, y una de ellas será mediante la estabilidad emocional.

Estabilidad emocional

La estabilidad emocional de los hijos depende mucho de la estabilidad emocional que tengan los padres. Es importante conocer las emociones para saber identificarlas y entenderlas en nosotros mismos y en los demás. De esta manera, podremos gestionar mucho mejor los estímulos externos, lo que nos venga del mundo exterior a nosotros. Poder tener una buena gestión de las emociones nos ayudará a afrontar des de la estabilidad situaciones que antes nos podían activar de manera poco funcional. Un ejemplo de situación compleja es la soledad.

Soledad y función paterna

En un estudio realizado por el ayuntamiento de Barcelona a mediados del 2021 se identificó que el 26,5% de los jóvenes de esta ciudad afirman sentirse solos, porcentaje que supera al de las personas de más de sesenta y cinco años, que es del 18,7%. Las consecuencias de los sentimientos de soledad pueden ser graves, y no solo en el ámbito mental, sino también en el físico. De hecho, un estudio reciente de la Asociación Americana de Piscología ha concluido que sentirse solo equivale a los efectos que te puede dar fumar quince cigarros al día. Des de un punto de vista cerebral y mental, la sensación de soledad durante la infancia i la adolescencia puede afectar mucho a la autoestima y propiciar la manifestación de ansiedad y depresión; los principales factores de riesgo son las relaciones familiares, especialmente con los principales cuidadores, los padres.

Después de haber leído el contenido del artículo, y concretamente este último párrafo, ¿alguien duda de la importancia que tienen los padres en el proceso de crianza de sus hijos?

El rol de la madre tiene importancia, pero el del padre también. La función paterna si no está bien ejercida puede ser un factor de riesgo para el hijo, pero si está bien ejercida puede ser un factor de protección, más si el soporte emocional es de calidad. ¿Quién tiene la responsabilidad? El adulto.

Desde el centro de psicología Canvis podremos tratar todos los temas expuestos, y podremos ayudarte a ejercer la función paterna o por ejemplo a orientarte sobre cómo gestionar no haber tenido esta función paterna, entre muchas otras cosas. En definitiva, estaremos a tu disposición.

Bibliografía

Arvelo, L. (2001). La masculinidad y la función paterna. Otras miradas. 1(1), pp 43-52. Recuperado de: https://www.redalyc.org/pdf/183/18310106.pdf

Bueno, D. (2022). El cervell d’un adolescent. Barcelona: Penguin Random House Grupo Editorial.

Rojas, M. (2021). Troba la teva persona vitamina. Barcelona: Columna.

Sánchez, P. (2015). Psicoanálisis y función paterna: el parricidio del cabo lorite. Ajayu. 13(1), pp 76-97. Recuperado de: http://www.scielo.org.bo/pdf/rap/v13n1/v13n1a05.pdf