Todas las personas hemos usado el término “narcisista” alguna vez, para referirnos a una persona que parece quererse a ella misma por encima de todo, que necesita ser el centro de atención y sentir aprobación y admiración por parte de los demás.

Podemos encontrar personas con rasgos narcisistas en cualquier ámbito de nuestras vidas: el trabajo, la familia, la pareja, profesores, personajes públicos, etc.

En algún momento de la vida todas las personas podemos presentar algún rasgo narcisista,o puede que conozcamos a personas que presentan habitualmente características narcisistas, pero solo un porcentaje muy bajo padece un trastorno de personalidad narcisista.

En este artículo vamos a ver qué es el narcisismo, qué caracteriza a las personas narcisistas, cómo son las relaciones con una persona narcisista, cuándo el narcisismo se convierte en algo patológico, las causas de la personalidad narcisista y cómo tratarlo cuando se convierte en un problema.

QUÉ ES EL NARCISISMO: CARACTERÍSTICAS

El término narcisismo se utiliza para describir a las personas que muestran una necesidad constante de sentir aprobación y admiración de los demás y carecen de empatía. Presentan sentimientos de grandiosidad en relación a sus propias capacidades y cualidades positivas y por ello exigen un trato especial, expresando ira o frustración cuando no lo reciben.

El narcisismo se puede confundir con el egocentrismo, pero son dos cosas distintas: el egocentrismo se refiere a una forma de pensar basada en los propios puntos de vista, omitiendo los de los demás, el foco de la atención se pone en uno mismo y se ignora a los otros, pero no exige aprobación por parte de los demás, ni muestra desprecio. La persona narcisista muestra escasa o nula empatía hacia los demás, mientras que ésta no tiene por qué ser una característica de las personas egocéntricas.

El origen del término debemos buscarlo en la mitología griega, “el mito de Narciso” dio nombre a este perfil de personalidad: Narciso era un joven con una apariencia bella, hermosa y llamativa. Tanto hombres como mujeres quedaban enamorados de él, pero Narciso siempre les rechazaba. Finalmente fue castigado por los dioses, quienes hicieron que se enamorara de su propia imagen reflejada en el agua. Incapaz de dejar de observar su reflejo, se arrojó al agua y murió convirtiéndose en la hermosa flor que lleva su nombre.

Este mito nos da a entender que el amor desproporcionado hacia uno mismo y la incapacidad para amar a las otras personas, no tiene un buen final.

  • 10 características que identifican rasgos narcisistas en la personalidad:

1- Autoconcepto fantasioso y exagerado de superioridad: predominan fantasías de éxito y grandiosidad y evitan la realidad cuando ésta se contradice con la imagen inflada que tienen de sí mismos. A veces, esto les puede llevar a mentir tanto a ellos mismos como a los demás: inventan datos, exageran logros, dan referencias inexactas, etc.. Se muestran arrogantes y prepotentes ya que se creen únicos y especiales.

2- Necesidad de admiración: necesitan ser admirados constantemente por lo que presentan una excesiva dependencia de la admiración de los demás sin la cual “no son nadie”. En su afán por destacar, exageran sus logros convirtiéndose en personas extremadamente competitivas: señalando lo negativo de las personas que les rodean para poder destacar por comparación.

3- Falta de empatía: muestran un egocentrismo excesivo ya que se mantienen enfocadas en si mismas constantemente. Pretenden ser el centro de atención y el eje sobre el que gira todo. La falta de visión de los demás les lleva a no ser capaces de percibir las emociones, sentimientos, necesidades de las personas que les rodean, por lo que no pueden identificar las emociones de los demás ni ponerse en la situación del otro.

4- Tienden a mostrarse crueles y soberbios: pueden llegar a menospreciar, humillar y devaluar a los otros, especialmente cuando sienten que pueden ser mejores que ellos. En ocasiones pueden mostrar avaricia y conductas explotadoras hacia los demás.

5- Ocultan sus emociones, especialmente la vulnerabilidad: su aparente sentimiento de superioridad y la necesidad de ser admirados hacen que traten de esconder sus defectos ya que les convierte en alguien vulnerable. Su vida emocional es entonces superficial y pueden presentar serias dificultades o son incapaces de comprometerse con los demás, tanto a nivel personal, como profesional o en la consecución de objetivos comunes.

6- Problemas en la comunicación, rechazo a la crítica: el objetivo de sus conversaciones es demostrar sus logros y virtudes, por lo que la comunicación es unidireccional: no escuchan ni muestran interés en el otro. No aceptan las críticas ya que necesitan ser constantemente admirados y valorados. Suelen expresar ira y una elevada hostilidad hacia las críticas negativas. Al presentar dificultades o imposibilidad para realizar una autocrítica objetiva, su autoestima está regulada por cambios de humor según las críticas o los halagos que reciben por parte de los demás.

7- Tendencia a ser controladores y manipuladores: tienden a controlar todo su entorno para poder mantener su situación de superioridad. Pueden llegar a tratar a los demás como simples instrumentos que les permiten obtener sus objetivos, manipulando a las personas con quien se relacionan. Pueden llegar a aprovecharse de los demás para conseguir sus metas.

8- La envidia: consciente o inconscientemente aparece este sentimiento, ya que necesita sentirse admirado y reconocido, y cuando los demás valoran a otra persona o siente que alguien puede ser mejor, va a experimentar enojo hacia esa persona y puede mostrar desprecio, esfuerzos por restarle valor o resentimiento. También es frecuente que sienta que los demás le envidian.

9- Sentimientos de vacío, aburrimiento y conductas adictivas: al ser incapaces de comprometerse con las personas o las cosas, viven en un estado de superficialidad que les puede llevar a tener sentimientos de vacío. La necesidad de sentir euforia, grandeza y admiración constante, y la negación del dolor y el malestar, les lleva al deseo de estimulación artificial y la necesidad de compensar el dolor o la frustración mediante conductas adictivas como las drogas, las compras o el sexo compulsivo, el juego, etc.

10- Falta de conciencia de sus rasgos narcisistas: la persona que presenta las características mencionadas hasta ahora no se identifica con ellas, porqué no van a ver exageración en sus necesidades de admiración, ni serán capaces de darse cuenta de sus tendencias manipuladoras o de sus sentimientos de superioridad hacia los demás, ya que las perciben como justos y realistas.

 

LAS RELACIONES DE LAS PERSONAS NARCISISTAS

Sus sentimientos de grandeza y éxito les convierte en personas que pueden llegar a resultar muy interesantes, encantadoras, especiales y deslumbrantes, en un primer momento. Pero mantener esta imagen de grandiosidad y perfección exige un enorme esfuerzo de autocontrol y exhibición, que resulta agotador, tanto para ellos mismo, como para los demás.

El enorme desgaste que provoca tratar de ser siempre “el mejor” les lleva a relaciones superficiales difíciles de mantener, por lo que suelen acabar evitando el contacto social duradero. A la larga, pueden resultar incluso aburridos ya que las personas que tratan con ellos se cansan de sus constantes aires de grandeza y demandas de admiración.

La falta de empatía, el egoísmo y egocentrismo, su incapacidad para ver o escuchar a los demás provoca que las personas con quien tratan se sientan despreciadas o ninguneadas. Y las dificultades para mantener relaciones íntimas profundas y sinceras, les lleva al aislamiento, la falta de vínculos emocionales estables y sanos y sentimientos de soledad o de no pertenecer a ningún grupo y a tener dificultades para encontrar apoyo social duradero.

Normalmente aparecen dificultades de adaptación en diferentes ámbitos (pareja, familia, trabajo, amistades, etc), ya que se muestran rígidos y no pueden tolerar tratos de subordinación, les cuesta delegar, pueden exigir un trato especial, etc.

Suelen mostrar poca tolerancia a la frustración, respuestas de ira o problemas para controlar sus impulsos, sobretodo cuando no son tratados como creen que se merecen o reciben críticas negativas. Estas reacciones, dificultan el contacto con los demás, que pueden sentir rechazo o miedo ante la persona con rasgos narcisistas.

Actualmente, las redes sociales facilitan la exposición pública de las personas y la ocultación de los defectos, por lo que se puede pensar que es un sitio ideal para personas con rasgos narcisistas. Pero no suele ser así, ya que es un medio que no pueden controlar y además les expone a posibles críticas que no pueden tolerar o a la posible indiferencia por parte de los demás.

 

NARCISISMO PATOLÓGICO

Es posible que nos identifiquemos con algunos de los rasgos narcisistas mencionados anteriormente o que los detectemos en personas de nuestro entorno, pero ello no quiere decir que estemos ante alguien con una personalidad narcisista ni mucho menos que estemos ante un problema patológico de la personalidad.

Hay diferentes estilos en la personalidad narcisista y diferentes niveles en cuanto a su complejidad y problemáticas asociadas. Por ello es importante identificar si se trata de algunos rasgos concretos que aparecen esporádicamente o en situaciones específicas, si existe una tendencia que ocasiona algunas dificultadeso si estamos ante un problema más importante que interfiere seriamente en el funcionamiento de la persona, sus relaciones y su bienestar o el de los demás.

El diagnóstico de trastorno de personalidaddebe ser realizado por profesionales de la salud mental y la prevalencia de este trastorno en la población general está entre el 1-2%.

El DSM-5:“Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales”, uno de los manuales más usados en salud mental, establece una serie de criterios necesarios para poder establecer el diagnóstico de “trastorno de la personalidad”:

patrón perdurable de experiencia interna y comportamiento que se desvía notablemente de las expectativas de la cultura del individuo que se manifiesta en dos o más ámbitos: cognición, afectividad, funcionamiento interpersonal y/o control de impulsos.

– el patrón perdurable es inflexible y dominante en una gran variedad de situaciones personales y sociales. Es estable y de larga duración y su inicio se puede remontar a la adolescencia o inicio de la edad adulta.

causa malestar clínicamente significativo o deterioro social, laboral o en otras áreas del funcionamiento.

 

EL ORIGEN DE LOS RASGOS NARCISISTAS

A pesar de que las personas con rasgos narcisistas suelen causar malestar a su alrededor y las relaciones que establecen pueden llegar a ser muy tóxicas, es importante tener en cuenta que en el fondo, ellas también sufren las consecuencias de su forma de ser, ya que sienten un gran malestar, normalmente inconsciente, debido a su miedo al rechazo, su baja autoestima, su enorme dependencia de los demás para sentirse valorados y la frustración ante la imposibilidad de controlar siempre la situación y a los demás.

No existe consenso acerca de las causas psicológicas de la personalidad narcisista. Algunas de las más nombradas son:

baja autoestima: por esto necesitan la valoración constante de los demás y no toleran las críticas. Necesitan ser valorados por los demás para sentirse válidos internamente. Temen ser excluidos. Pero la incapacidad de aceptarse como vulnerables provoca una desplazamiento de sus miedos hacia conductas destructivas para ellos o los demás

cuidadores narcisistas que efectúan valoraciones constantes (tanto positivas como negativas) y generan una sensación en el niño de ser constantemente evaluado. Padres que tratan de explotar las virtudes de sus hijos para mantener su propia autoestima. Los hijos pueden haberse sentido muy importantes para sus padres pero no por quienes son, sino por lo útiles que les resultaban, pudiendo mostrar orgullo por un lado o decepción y humillación por otro.

vergüenza ante la intolerable sensación de ser visto como malo o inadecuado.

vulnerabilidad a la envidia: la falta de autoestima provoca la creencia interna, probablemente inconsciente, de que se carece de algo y si se detecta que el otro es más válido, se corre el riesgo de quedar expuesto a la propia inadecuación.

A pesar de la falta de conciencia de que el problema pueda estar en uno mismo, la persona con tendencias narcisistas, tarde o temprano es consciente de que algo va mal en su vida, ya que aparecen problemas en la relación con los demás, a menudo en el ámbito laboral, lo que les dificulta el poder mantener sus puestos de trabajo o en sus relaciones personales, refiriendo sentimientos de vacío o aburrimiento.

 

TRATAMIENTO DE LOS RASGOS NARCISISTAS

Las dificultades en la relación, los sentimientos de superioridad y arrogancia, junto con la falta de conciencia de ser el problema y la ilusión de no tener defectos ni necesitar a los demás, dificulta la modificación y flexibilización de los rasgos narcisistas por parte de ellos mismos o de su entorno, sin la ayuda de un profesional de la psicología o la salud mental.

McWillims en 2011 (citado en Díaz-Benjumea, Lola,J., 21014)  ofrece una serie de sugerencias para los profesionales que tratan con pacientes con personalidad narcisista:

a- un objetivo general será ayudar al paciente a encontrar la autoaceptación sin inflar el concepto de sí mismo ni devaluar a los otros. Un primer requisito es la paciencia por parte del terapeuta, especialmente necesaria para el aburrimiento y la desmoralización.

b- ya que el terapeuta sirve de modelo y facilita una forma de relacionarse más sana y adaptativa, la paciencia y la aceptación de las imperfecciones humanas, la actitud humana y realista y la humildad van a ser especialmente útiles como modelo para la persona narcisista.

c- prestar atención a los propios errores por parte del terapeuta, especialmente los errores de empatía. Disculparse, a la vez confirma la percepción del paciente de ser maltratado, validando su sentimiento y da ejemplo de mantener la autoestima mientras se admiten los fallos.

d- no ser excesivamente autocrítico cuando se reconocen los errores, porque si el paciente ve al terapeuta con mucho remordimiento, el mensaje recibido es que los errores son raros y requieren una rígida autocensura.

e- constante atención plena al concepto que tiene el paciente sobre sí mismo, ya que incluso el narcisista más arrogante sentirá vergüenza ante la crítica, hay que intervenir con sensibilidad.

f- al tener una autoestima muy frágil al paciente le puede ser muy difícil reconocer en él algo negativo, oculta sus errores. Esto puede inducir al terapeuta a realizar un confrontación no empática o a unirse con el paciente en el lamento sobre el mal trato que recibe de los demás. Ninguna de las dos opciones es terapéutica.

g- cuando las imperfecciones son visibles, el paciente tiende a justificarse. El terapeuta se enfrenta a la tarea de aumentar la toma de conciencia del narcisismo, sin que estimule demasiado la vergüenza pudiendo empeorar el tratamiento.

h- a pesar de que el terapeuta puede sentir que no significa nada para el paciente, el problema de autoestima hace que lo necesite más de lo que parece.

 

En el Centro de Psicología Canvis de Barcelona, nuestro equipo de profesionales, te puede brindar apoyo y acompañamiento a la hora de identificar rasgos o tendencias narcisistas en tu forma de ser o en alguna persona de tu alrededor, que pueden generar dificultades o malestar en tu día a día. Con el tratamiento adecuado es posible mejorar los problemas de autoestima, de comunicación, conflictos emocionales actuales o del pasado, que dificultan tus relaciones personales o el funcionamiento adecuado en el trabajo, con la familia, tus amistades, etc.

 

Bibliografía:

– Asociación Americana de Psiquiatría. (2013) Manual de diagnóstico y estadística de trastornos mentales (5ª ed.). Washington DC.

-Díaz-Benjumea, Lola., 2014. Personalidades Narcisistas. Número 047, 2014 (McWilliams, N.Diagnóstico Psicoanalítico. Comprendiendo la estructura de personalidad en el proceso clínico.)